lunes, 18 de noviembre de 2013

LLUEVE...



Llueve sobre la ceniza del recuerdo, mansamente ha desaparecido noviembre. Ya no hay luz, y tu me sigues acariciando hasta perdernos en el tiempo.
Llueve sobre el fuego, lentamente la gran avenida apunta hacia la luna.
Ya no hay palabras, y tu me sigues acariciando.
...
Ya está dicho todo.
La escena se renueva y de improviso suena un eco seco en el tímpano de lo imposible, vuelven los jinetes vestidos con harapos ancestrales.
De repente un tropezón y siento el barro humedecer mi pierna.
Llueve...

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