La lluvia
está mojando mi cara,
siento resbalar una tras otra
sus gotas,
gélidas como el hielo.
Lluvia
que intenta apagar mi fuego,
el fuego
que me hierve el alma,
y que poco a poco
me va hacer estallar.
Y sin embargo antes que ser corazón de barro,
sé que debo recurrir a maltratar cuadrículas.
¿ Te enteras...?
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